Lo que une a los medios de comunicación es un deseo insaciable de mantener la atención de la mayor audiencia viable durante el mayor tiempo posible. La página de inicio de cada sitio web de medios de comunicación cuenta con una gran cantidad de titulares con palabras de moda llamativas.  Los personajes principales de las noticias suelen ser las figuras políticas de Estados Unidos, como Donald Trump y Alexandria Ocasio-Cortez, junto con figuras de interés público como Lebron James y el Chapo esta semana. De hecho, el público está actualmente tan obsesionado con el consumo de información sobre el Chapo que cada día hay nuevos artículos escritos sobre él. Si busque sobre el Chapo en el País, aparecerán casi 3,000 artículos. Además, El Nuevo Herald tiene casi 600 artículos en su sitio web sobre él, y la Jornada modestamente tiene 200 artículos sobre él en comparación. Esto se acumula en miles y miles de artículos que se escriben sobre esta persona individual, o más bien, este personaje. Es como si hubiera una obligación periodística no solo de capitalizar el interés del público, sino también de crear este interés.

Otro aspecto sorprendente de estos medios periodísticos en Internet es la alarmante cantidad de anuncios que inundan las páginas. Ahora entiendo que los anuncios son un mal necesario de la información pública gratuita en Internet, lo entiendo. Sin embargo, hay tantos anuncios que pesan en el servidor que hace que el contenido real del sitio sea bastante difícil de acceder y navegar. No es que sea una fanática de la teoría de la conspiración que usa sombrero de papel de aluminio, pero me parece que todos los medios de comunicación son un anuncio gigante. Sus sitios web están llenos de espías que rastrean cada clic que haces, formulando algoritmos con la intención de apuntarte directamente para venderte algo. Los medios de comunicación le dan a cada individuo lo que quiere consumir.  

Cuando estemos cayendo en un agujero de información en la salida de medios de su elección, debe acceder a sus habilidades de pensamiento crítico y preguntarse: “¿por qué esta persona eligió escribir este artículo en particular? ¿Por qué esta historia? ¿Por qué este titular? ¿Cuál es su intención? ” Porque sin la capacidad de pensar críticamente, la información puede convertirse fácilmente en ignorancia.